Ser Psicólog@

No entraba en mis planes de futuro en edad adolescente ser Psicóloga hasta que por destino pude conocer una pincelada de lo que es ésta profesión, al menos me creó una curiosidad inmensa y me llevó a decantarme por ella. No fue fácil la carrera puesto que el ser humano en todas sus vertientes es complejo e intentar plasmarlo todo en libros es más complejo aún. Los libros te enseñan y te forman pero en la práctica todo va más allá.

Sigo convencida de que esta profesión es una autentica desconocida, de que aún hay personas que piensan que tenemos el superpoder de leer la mente, que tenemos la sabiduría infinita de todo y que nuestro comportamiento debe ser siempre correcto y ejemplar.

Pues la Psicología y ser Psicólog@ no es nada de eso y es algo más que todo eso, es recibir a una persona con una sonrisa y templanza mientras esa persona se ahoga de pena y tiembla de miedo y conseguir ponerte una coraza para que ese sentimiento no te traspase, simplemente porque necesitan que alguien sea fuerte y comprensiv@ ante ellos. Es recibir a una persona que va a desnudar su alma hasta donde muchos ni se imaginan y esperan de ti que los arropes y les tiendas una mano para salir del agujero donde están. Es ver unos ojos sin vida llegar y conseguir que brillen al salir, es sin duda, la profesión más bonita que pude elegir porque me enseñó a trabajar con el ser humano en su parte más íntima y porque la recompensa de este trabajo llega cuando ell@s cruzan la puerta un día riendo a carcajadas y sintiéndose feliz